MI CORONEL RAFAEL COSIO

Cada nuevo año presenta nuevos retos y desafíos los cuales,  en algunas ocasiones, son comunes y compartidos.  El día de hoy dio inicio el XI curso de Altos Estudios Estratégicos en donde he tenido la oportunidad de conocer al Coronel Rafael Cosio (que por su apellido me ha hecho recordar al reconocido filósofo y jurista Carlos Cossio), un joven oficial del Ejército de Guatemala, casado y padre de  dos hijos menores una niña y un niño de trece y dieciséis años, respectivamente, quien no solo alberga un claro deseo de superación sino además, dentro de sus metas para los próximos diez años tiene contemplado obtener un Doctorado en seguridad y defensa y convertirse en un abnegado abuelo y en un exitoso empresario. No me cabe la menor duda que veremos al Coronel Cosio alcanzar todas y cada una de sus metas, pues cuando las personas tienen grandes sueños alcanzan grandes metas.

El pilar fundamental en su vida, que constituye el motor que ha generado en él ese espíritu de superación personal es la estabilidad familiar, pues su familia constituye la fuente principal de su inspiración y la  base fundamental de su desarrollo personal, aunado a una fe cimentada sobre principios cristianos inquebrantables.

Considera que para alcanzar sus metas académicas debe dedicar más tiempo al estudio y a la lectura, y para ello deberá incrementar su velocidad en  la lectura y, además,  mejorar el conocimiento de otros idiomas y aprender a planificar, de mejor forma, su agenda personal.

Como a todo oficial del Ejército de Guatemala de su generación, al Coronel Cosio le tocó vivir de cerca el conflicto armado interno iniciado en los años sesenta y que se prolongó por más de treinta años.  Hoy, a quince años de haberse firmado los Acuerdos de Paz entre el Gobierno de Guatemala y la URNG, que pusieron fin a dicho conflicto, y al recapitular las causas que lo motivaron y sus consecuencias, ve una nación dividida que no ha logrado superar las deficiencias que continúan  impidiendo el desarrollo social y económico del país debido, en gran parte, a intereses sectarios.

Su sueño en el corto plazo es continuar con sus estudios y al concluir este programa de altos estudios estratégicos, obtener el grado de Doctor en Seguridad y Defensa.